
Tiene mayor incidencia en mujeres que en hombres y también es mayor la incidencia en personas de más de cincuenta años.
El dolor suele aparecer de forma espontánea, quedan zonas especialmente sensibles que provocan dolor al contacto (se las denomina zonas gatillo). El dolor se induce al intentar hablar, masticar, gesticular, cepillarse los dientes o tocar un área facial.
Tenemos varios síntomas:
Espasmos muy dolorosos, como pulsaciones eléctricas penetrantes que generalmente duran unos cuantos segundos o minutos, pero pueden volverse constantes.
Equipo ACUMEDIC